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Aprovecho nuevo foro para quitarme la espinita, y presentarme tras... ¿2 años? incordiando en la comunidad
Soy conductor de bastante tiempo (y horas de carretera) sobre 4 y 6 ruedas (coches varios, todoterreno y camión pequeño), tanto a nivel particular cómo profesional. Cuando petó mi último coche, el 2018, tardaba casi 20 minutos en el trayecto casa-trabajo andando (e iba a comer a casa), así que tras mirar varios coches de segunda mano, y no tener ningún flechazo, me replanteé el asunto, y miré un poco por curiosidad el tema de hacerme con una amoto. Me fué picando el gusanillo, los números cuadraban y decidí hacerme con una 125cc (carné de convalidado no da para más) de gama básica (así que pude pagar a tocateja), pero de una marca reconocida: Rieju. La primera aventura fue bajarla hasta mi casa (4 minutillos con tráfico fácil de ciudad pequeña), y después de currar, ir a hacer pruebas en el polígono industrial, desierto a esas horas. Los 20 minutos por recorrido casa-curro pasaron a ser 5, aparcando en la puerta del curro y en el "almacén" de mi casa. Además de las rutillas de fin de semana en plan forever alone, que son las que más sigo disfrutando del paisaje y las sensaciones de comunión con la naturaleza.
Se acabó el contrato en ese curro, me salieron cosillas, pero ya a más de 30km, así que la moto que en principio era para uso urbano y rutillas, se convirtió en vehículo de uso diario por carretera. Disfruté cómo un enano, incluso en días de viento y lluvia (igual soy medio masoca, pero dicen que sarna con gusto no pica), con eso me fuí equipando con ropa motera. Al llegar a los 6.000km, empezaron los problemas de ruidos, me cambiaron en garantía el tensor de cadenilla (una semana tardaron), pero ya me pusieron pegas porque decían que me había pasado de quilometraje para la revisión de los 5.000km (en la revisión anterior nunca mencionaron cuando tocaba la siguiente). Me dejaron un testigo encendido de fallo motor que no pudieron/supieron/quisieron borrarme al momento (se apagó solo tras un km de circular), y que a día de hoy sigo esperando que me llamen para borrarlo de la centralita.
Al poco, la moto empezó de nuevo a hacer ruidos medio raros, y a tirar algo menos. Cómo no podías estar otra vez días sin moto, me lo tuve que apañar yo mismo, descubriendo que estaba mal puesta a punto la cadena de distribución. Desde ese momento, la moto no la han tocado manos que no sean las mías.
Tras volver a partir el tensor de cadenilla (sería defectuosa la fabricación del componente, porque de otra no se entiende) que convertí en tensor manual, tornillos partidos varios, rosca comida, un balancín comido que me dejó tirado en carretera más recientemente, ahora, con 20.000km, lleva arbol de levas nuevo, y cuando tenga un momento tengo listo para montarle kit de transmisión nuevo. Tengo nuevo sin sacar de la caja unos puños calefactables que no me atreví a instalar este invierno, por no tener claro si la moto iba terminar cualquier dían el el desguace. Con el tiempo le monté un suporte y baúl de casco y medio de capacidad (el casco de verano lleva parasol y ocupa mucho), y unos paravientos para las manos, que en invierno o con lluvia se notan mucho.
Tengo planteado en firme el sacarme el A2, que por el uso de carretera que hago, me haría falta algo con más potencia, ya que es mi único vehículo para todo. Pero por tema-excusa de la pandemia, los trámites se eternizan, y no me veo alargando todo el trámite medio año o más. Cualquier día me puede la impaciencia y me apunto... ya tengo medio apalabrada una GS500 que habría que poner a punto, que lleva parada desde el confinamiento (igual le monto a esta los puños calefactables). Llegado el momento, seguramente reconvertiría la Rieju en una scrambler para ir por lo marrón.
Poco más. Ahí unas fotillos:
Primer trayecto largo, subiendo a Barcelona. Descanso bajando de Begues.
Descansando tras una rutita off-road con un amigo. Fireball no es el único al que le gusta vivir al límite
Pero la mayoría de fotos que tengo de la moto son del plan:
Soy conductor de bastante tiempo (y horas de carretera) sobre 4 y 6 ruedas (coches varios, todoterreno y camión pequeño), tanto a nivel particular cómo profesional. Cuando petó mi último coche, el 2018, tardaba casi 20 minutos en el trayecto casa-trabajo andando (e iba a comer a casa), así que tras mirar varios coches de segunda mano, y no tener ningún flechazo, me replanteé el asunto, y miré un poco por curiosidad el tema de hacerme con una amoto. Me fué picando el gusanillo, los números cuadraban y decidí hacerme con una 125cc (carné de convalidado no da para más) de gama básica (así que pude pagar a tocateja), pero de una marca reconocida: Rieju. La primera aventura fue bajarla hasta mi casa (4 minutillos con tráfico fácil de ciudad pequeña), y después de currar, ir a hacer pruebas en el polígono industrial, desierto a esas horas. Los 20 minutos por recorrido casa-curro pasaron a ser 5, aparcando en la puerta del curro y en el "almacén" de mi casa. Además de las rutillas de fin de semana en plan forever alone, que son las que más sigo disfrutando del paisaje y las sensaciones de comunión con la naturaleza.
Se acabó el contrato en ese curro, me salieron cosillas, pero ya a más de 30km, así que la moto que en principio era para uso urbano y rutillas, se convirtió en vehículo de uso diario por carretera. Disfruté cómo un enano, incluso en días de viento y lluvia (igual soy medio masoca, pero dicen que sarna con gusto no pica), con eso me fuí equipando con ropa motera. Al llegar a los 6.000km, empezaron los problemas de ruidos, me cambiaron en garantía el tensor de cadenilla (una semana tardaron), pero ya me pusieron pegas porque decían que me había pasado de quilometraje para la revisión de los 5.000km (en la revisión anterior nunca mencionaron cuando tocaba la siguiente). Me dejaron un testigo encendido de fallo motor que no pudieron/supieron/quisieron borrarme al momento (se apagó solo tras un km de circular), y que a día de hoy sigo esperando que me llamen para borrarlo de la centralita.
Al poco, la moto empezó de nuevo a hacer ruidos medio raros, y a tirar algo menos. Cómo no podías estar otra vez días sin moto, me lo tuve que apañar yo mismo, descubriendo que estaba mal puesta a punto la cadena de distribución. Desde ese momento, la moto no la han tocado manos que no sean las mías.
Tras volver a partir el tensor de cadenilla (sería defectuosa la fabricación del componente, porque de otra no se entiende) que convertí en tensor manual, tornillos partidos varios, rosca comida, un balancín comido que me dejó tirado en carretera más recientemente, ahora, con 20.000km, lleva arbol de levas nuevo, y cuando tenga un momento tengo listo para montarle kit de transmisión nuevo. Tengo nuevo sin sacar de la caja unos puños calefactables que no me atreví a instalar este invierno, por no tener claro si la moto iba terminar cualquier dían el el desguace. Con el tiempo le monté un suporte y baúl de casco y medio de capacidad (el casco de verano lleva parasol y ocupa mucho), y unos paravientos para las manos, que en invierno o con lluvia se notan mucho.
Tengo planteado en firme el sacarme el A2, que por el uso de carretera que hago, me haría falta algo con más potencia, ya que es mi único vehículo para todo. Pero por tema-excusa de la pandemia, los trámites se eternizan, y no me veo alargando todo el trámite medio año o más. Cualquier día me puede la impaciencia y me apunto... ya tengo medio apalabrada una GS500 que habría que poner a punto, que lleva parada desde el confinamiento (igual le monto a esta los puños calefactables). Llegado el momento, seguramente reconvertiría la Rieju en una scrambler para ir por lo marrón.
Poco más. Ahí unas fotillos:
Primer trayecto largo, subiendo a Barcelona. Descanso bajando de Begues.
Descansando tras una rutita off-road con un amigo. Fireball no es el único al que le gusta vivir al límite
Pero la mayoría de fotos que tengo de la moto son del plan:
aún que no tiene ni 10k km.
